Descubre PRX-PLUS de WiQo, una fórmula innovadora y patentada que te ayuda a lograr una piel visiblemente más luminosa y firme, con efecto tensor inmediato, sin agujas ni procedimientos invasivos.
Seguro para todas las estaciones
PRX-PLUS es un protocolo cosmético profesional que puede aplicarse incluso en verano, ayudando a mantener una piel luminosa durante todo el año.
Apto para todos los tipos de piel
Ya sea seca, sensible o grasa, nuestra fórmula profesional está diseñada para mejorar visiblemente el aspecto de todo tipo y tono de piel.
Sin peeling
Disfruta de una piel más suave y luminosa sin las molestias de la descamación. PRX-PLUS actúa sin generar exfoliación aparente ni tiempo de recuperación.
Sin agujas
Consigue una piel de aspecto revitalizado sin procedimientos invasivos. PRX-PLUS ofrece una experiencia cómoda y sin molestias.
Solo 15 minutos
En tan solo 15 minutos, puedes disfrutar de una experiencia cosmética eficaz, ideal como potenciador del aspecto de la piel para ocasiones especiales.
Efecto visible desde la primera sesión
Desde la primera aplicación, es posible notar una piel con aspecto más luminoso, suave y revitalizado.
WiQo es una empresa italiana con años de experiencia en el mercado estético, reconocida internacionalmente por sus tratamientos no invasivos. Ahora, PRX-PLUS
llega a América Latina para ofrecer una nueva experiencia en cuidado con la piel: una fórmula patentada que brinda luminosidad, firmeza y revitalización visibles desde las primeras aplicaciones, en todo tipo de piel.
Con el tiempo, la piel pierde elasticidad, se vuelve más seca y su aspecto cambia debido a la disminución natural de colágeno y lípidos. Como consecuencia, pueden aparecer arrugas marcadas incluso en reposo, acompañadas de una sensación de menor firmeza.
Frente a estos signos visibles, es importante incorporar cuidados que aporten hidratación y mejoren la textura.
Las manchas oscuras o parches marrones son zonas donde la piel presenta una coloración más intensa debido a un exceso localizado de melanina. Su aparición suele estar relacionada con la exposición solar, cambios hormonales o irritaciones previas. Para este tipo de piel, es esencial incorporar cuidados que ayuden a uniformar el tono y a mantener la luminosidad natural.
Las líneas finas son uno de los primeros signos visibles del envejecimiento y suelen aparecer en zonas de expresión frecuente, como alrededor de los ojos o la boca. Están asociadas a los gestos faciales y a la progresiva pérdida de elasticidad y luminosidad en la piel.
Cuando estas líneas comienzan a hacerse visibles, es fundamental adaptar la rutina de cuidado con productos que aporten hidratación, firmeza y ayuden a mejorar el aspecto general de la piel.
El envejecimiento de la piel es un proceso biológico natural, influenciado por factores internos y externos. Aunque los signos visibles pueden tardar en aparecer, desde los 20 años ya comienzan ciertos cambios, como la disminución progresiva en la producción de colágeno. Por eso, es importante cuidar la piel incluso antes de que se noten los primeros signos, apoyando sus mecanismos naturales y ayudando a mantener una apariencia firme y luminosa por más tiempo.
La hiperpigmentación postinflamatoria se refiere a manchas oscuras que aparecen en la piel tras una irritación, enrojecimiento o imperfección. Es más común en pieles de tonos medios a oscuros y suele manifestarse después de brotes, lesiones o procedimientos agresivos. En estos casos, es clave incorporar productos que ayuden a mejorar la uniformidad del tono y la luminosidad.
La piel con poros dilatados suele presentar textura irregular, exceso de brillo en la zona T y puntos negros visibles. Aunque a veces se asocia a piel grasa, también puede estar seca o sensible en otras áreas del rostro. En estos casos, es importante adoptar una rutina que ayude a purificar la superficie de la piel, afinar su textura y mejorar su luminosidad.
La falta de luminosidad es una preocupación común, caracterizada por un aspecto apagado, tono irregular y falta de brillo. Este aspecto puede estar relacionado con varios factores, como la acumulación de células muertas, el exceso de queratina, una capa superficial de la piel más gruesa o deshidratación, que contribuyen a una apariencia grisácea y sin vitalidad.
Este tipo de piel se caracteriza por la aparición recurrente de imperfecciones visibles, que pueden incluir puntos negros, poros obstruidos y granos inflamados. Suelen estar asociadas a un exceso de sebo y desequilibrios en la superficie cutánea. En estos casos, es fundamental elegir productos que ayuden a purificar, equilibrar y mejorar el aspecto general de la piel.
Algunas cicatrices se presentan como pequeñas depresiones en la piel, resultado de una reparación cutánea incompleta. Este tipo de marcas suelen aparecer después de imperfecciones profundas o lesiones que afectan la textura de la piel. Para mejorar su apariencia, se recomienda una rutina de cuidado que ayude a alisar visualmente la superficie y a aportar uniformidad.